¿Labios secos? ¡Descubre sus causas y cómo tratarlos!
La sequedad labial, como seguramente habrás podido comprobar, es un problema muy frecuente entre la mayoría de personas. Generalmente se produce por agentes externos, como el frío o el sol, aunque en ocasiones puede indicarnos ciertas patologías o incluso malos hábitos.
Desde Blistex, especialistas en el cuidado y protección de los labios, te detallamos las posibles causas de esta sequedad, así como las claves para prevenirla y lucir unos labios sanos. Toma nota de nuestras recomendaciones y ¡despídete por fin de los labios secos!
Causas de los labios secos
Como hemos comentado en otros artículos, la piel de los labios es extremadamente sensible y, además, reúne la particularidad de no poseer glándulas sudoríparas ni sebáceas. Es decir, no dispone de lípidos protectores que mantengan su humedad de forma natural, por lo que tiende a deshidratarse más rápidamente que la dermis de otras partes del cuerpo.
Teniendo en cuenta lo anterior, la sequedad en los labios se produce básicamente por agentes climáticos. De hecho, si te fijas, normalmente solemos tener los labios resecos en invierno, por la bajada de temperaturas, o contrariamente en la época estival, debido a la exposición prolongada al sol.
Aunque también existen otros factores que pueden fomentar unos labios secos, tales como ciertas sustancias (tabaco, alcohol…), la falta de vitaminas o la deshidratación. En los casos más extremos nos pueden alertar de posibles reacciones alérgicas o patologías autoinmunes.
Tratamiento y remedios para los labios secos
Para decir adiós a unos labios agrietados y escamosos y, por lo tanto, evitar las molestias que se derivan de este tipo de afecciones, ten muy presente cada uno de los consejos que especificamos a continuación. ¿Empezamos?
1. Agua, agua y más agua
La sequedad labial puede ser un signo evidente de deshidratación, así que lo mejor que puedes hacer es acostumbrarte a beber mucha agua a diario. Son múltiples los beneficios que se derivan de esta sana costumbre, cuyos efectos no solo notarás en la salud de tus labios, sino en todo tu organismo.
2. ¡Nada de humedecerse los labios!
¿Sabías que lejos de ayudar, el hecho de lamerse los labios agrava su sequedad? Sí, sí, el hecho de humedecerse los labios con la saliva empeora esta afección e incluso puede producir queilitis, que es la inflamación de los mismos. En resumen, recuerda que la saliva es una sustancia irritante que posee enzimas digestivas, por lo que es imprescindible que abandones este acto reflejo. Si tienes los labios agrietados o muy secos, tampoco los muerdas ni los pellizques, pues retrasarás su curación.
3. Respira por la nariz y evita los alérgenos
Parece obvio, pero no todo el mundo respira como es debido. Y es que muchas personas lo hacen por la boca, promoviendo la sequedad labial de manera exponencial. Asimismo, es indispensable evitar en la medida de lo posible los alérgenos, pues también afectan a la humectación natural de los labios.
4. Apuesta por una dieta sana y equilibrada
Tal y como hemos detallado al inicio del post, en diversas ocasiones podríamos evitar la sequedad labial si ingiriéramos todos los nutrientes que necesita nuestro organismo. Para ello, lo único que debes hacer es alejarte de las dietas milagro y seguir una alimentación rica y variada en vitaminas y minerales, por ejemplo, la dieta mediterránea, que es rica en frutas y verduras.
5. Hidrata tus labios con un protector labial
En el artículo «Cómo prevenir o disimular las arrugas de los labios» ya te avanzamos que los labios son mucho más susceptibles a la deshidratación porque carecen de glándulas sebáceas, encargadas de segregar el sebo, sustancia que tiene como función lubricar y proteger la superficie de la piel. Por consiguiente, es fundamental el uso de protectores labiales, que hidratan en profundidad esta zona tan delicada, para que disfrutes de unos labios suaves y saludables, independientemente de la época del año en la que te encuentres.
Recuerda, ya sea como prevención o ante los primeros síntomas de sequedad, aplícate con regularidad estos grandes aliados, te salvarán de muchas molestias. No olvides llevar uno siempre contigo, en el bolso o en el bolsillo, para poder usarlo regularmente.
Si estás buscando un protector labial que te ofrezca el máximo cuidado ante la sequedad de los labios, te recomendamos nuestro bálsamo «Hemp & Shea Hydration», desarrollado especialmente para proporcionar una hidratación extrema 24 horas, gracias a su fórmula con ingredientes naturales de aceite de cáñamo y manteca de karité.
Si lo prefieres, disponemos de otro protector labial que, además de ofrecer hasta 24 horas de hidratación duradera, te protege contra los rayos del sol UVB, ya que posee un índice de FPS 15. Se trata de «Lip Infusion Hydration», cuya composición innovadora a base de esferas de ácido hialurónico y vitaminas (E y F), bloquean la humedad del ambiente, suavizando y alisando la superficie de los labios.
6. ¡Exfóliate los labios!
Has leído bien. Exfoliarse la piel de los labios para regenerar las células muertas es muy beneficioso para tu salud labial. Te contamos por qué es importante exfoliártelos, todos sus beneficios, cómo hacerlo correctamente y con qué frecuencia, así como qué exfoliante natural puedes emplear, rituales de hidratación Blistex y un completo «paso a paso» en nuestro post «Todo lo que la exfoliación puede hacer por tus labios».
7. Protege tus labios del sol
Al igual que el resto de la piel de tu cuerpo, también debemos proteger la dermis labial de los efectos nocivos del sol. Recurrir a protectores labiales con factor de protección solar (FPS) es indispensable para evitar la sequedad en esta parte del cuerpo y, así, apostar por la salud cutánea. De hecho, ¿eres consciente de que tus labios también pueden sufrir quemaduras solares?
Con el objetivo de evitar las agresiones solares, Blistex dispone de un amplio abanico de productos labiales con distintos índices de FPS, cuya fórmula también está especialmente diseñada para hidratar los labios secos y/o agrietados.
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